SEGUIMIENTO

La importancia del seguimiento en el Tratamiento del TDAH

Debido al impacto que tiene el trastorno sobre las diferentes áreas de la vida del afectado, es necesario atender y hacer un seguimiento riguroso sobre los aspectos cognitivos, conductuales, educativos, afectivos, familiares y sociales con el objetivo de mejorar los síntomas de la enfermedad (hiperactividad, impulsividad y déficit de atención).

                                

El tratamiento del TDAH debe ser individualizado y diseñado por un especialista o grupo de especialistas en función de las características sintomatológicas, las circunstancias que rodeen al caso (problemas asociados, entorno, escuela, etc.), la familia y al entorno.

Para que el tratamiento sea efectivo y muestre mejoría a corto, medio y largo plazo es fundamental que se lleve a cabo un seguimiento del mismo desde todos los ámbitos:

Ámbito sanitario

Los padres deben buscar un médico para que evalúe y trate al niño/a, que tenga tiempo y paciencia para seguir al niño/a en su evolución y que muestre una actitud cooperativa en el tratamiento.  

El médico en función de las características del caso indicará el tratamiento médico más adecuado para la problemática sintomatológica y sanitaria del niño/a, incluyendo farmacoterapia en el caso de que sea necesario.

En el caso de que el médico prescriba medicación, deberá hacer un seguimiento médico del peso, talla y analíticas para corroborar que está todo correcto. A veces se pueden producir algunos efectos secundarios generalmente leves como la disminución del apetito o del sueño, fácilmente reversibles o controlables bajando o modificando la dosis.

Con el fin de evitar que surjan problemas en el desarrollo o mala respuesta el tratamiento es fundamental la comunicación entre padres y profesores y se que realice en seguimiento que contemple los siguientes puntos, de acuerdo a alcanzar los objetivos terapéuticos y conseguir las competencias académicas y sociales:

• Valoración de aspectos médicos y fisiológicos
• Seguimiento de la respuesta al tratamiento farmacológico
• Mediciones periódicas de peso y talla
• Adaptación de medidas específicas en el campo de la salud hacia el niño/a
• Atención a los posibles efectos secundarios del tratamiento farmacológico
• Supervisión por parte de los padres del hogar de posibles cambios en el estado de ánimo, comportamiento o fisiológico
• Facilitar medidas y orientar a los padres de cara a paliar y tratar los posibles problemas de tipo médico (sueño, alimentación, desarrollo físico, etc.)
• Revisiones periódicas de la medicación y la dosis prescrita del tratamiento farmacológico 
• Reuniones periódicas de los padres con el médico responsable
• Acudir al médico ante cualquier duda con respeto al tratamiento o cualquier aspecto de la salud que surja
• Atender y tratar la comorbilidad asociada al TDAH

Ámbito familiar

La intervención de los familiares es muy importante ya que ellos son los que conviven día a día con el niño que tiene TDAH. La función de los familiares es la de continuar con los objetivos médicos que éste ha pre inscrito, además de los objetivos e intervenciones propuestas a nivel educativo y psicológico..

Deben establecer un sistema de funcionamiento estructurado y organizado mediante normas claras y definidas, con el fin de modificar aquellos comportamientos desadaptativos y potenciar los comportamientos y hábitos positivos.

"Los padres deben aceptar de forma activa, comprender e implicarse en el tratamiento del hijo/a afectado/a y deben coordinarse con los Servicios Sanitario Infanto-Juveniles y con el centro escolar y deben ser el núcleo de coordinación del resto de apoyos y servicios de atención del afectado", llevando a cabo las siguientes acciones:

• Buscar apoyo y orientación profesional
• Disponer de actitud positiva y cooperativa con los diferentes profesionales e instituciones que atienden el caos de su hijo/a
• Métodos de actuación específicos en el hogar que atiendan a aspectos conductuales emocionales, actitudinales de comunicación
• Entrenamiento y Escuelas de padres
• Establecer contacto y comunicación continua con el centro escolar
• Establecer contacto y comunicación continua con los agentes sanitarios
• Participar de actividades familiares que mejoren y potencien la dinámica familiar
• Apoyar las dificultades del hijo/a en casa
• Reconocer el rol de padres y modelo de actuación para su hijo/a
• Fomentar desde la familia aspectos cruciales como la buena autoestima, una comunicación adecuada, factores motivantes y  la adaptabilidad positiva a los diferentes entornos
• Facilitar a su hijo/a actividades extraescolares que puedan motivarle, interesarle y mejorar su autoestima. 

Aquellas instrucciones y directrices que se establecen en la terapia familiar por parte del psicoterapeuta o médico, deben ser asumidas por los padres y familiares y llevarse de forma rigurosa, tal y como se ha acordado en las sesiones de intervención familiar.

Es muy importante que la familia siga lo propuesto por los especialistas, ya que en caso contrario, si estos no siguen las directrices pactadas en el día a día del niño, el tratamiento no será efectivo.

Ámbito educativo

El seguimiento en el ámbito educativo, es fundamental para el desarrollo de sus capacidades y de su roceso de aprendizaje. Se considera importantes y útiles las adaptaciones y medidas específicas cuando existen necesidades educativas en estos alumnos, que en ocasiones contemplan: facilidades para los exámenes, apoyos en clases, instrucciones adaptadas, reducción de contenidos, supervisión directa o indirecta del personal docente, etc.

Además también es esencial en este ámbito hacer intervenciones conjuntas con padres y profesores. Para ello, es fundamental que exista un canal de comunicación entre padres y profesores y se realice un seguimiento que contemple los siguientes puntos, de acuerdo a alcanzar los objetivos académicos y conseguir las competencias académicas y sociales 

• Valoración de las dificultades y problemas académicos por parte del centro
• Valoración de las dificultades y problemas de niños/a en el ámbito social (compañeros, amigos, profesores, etc.)
• Seguimiento de las dificultades por parte del profesional docente
• Seguimiento de las dificultades por parte de los padres en el hogar
• Facilitar materiales y actuaciones en el aula y en casa que motiven y potencien el aprendizaje
• Asistir los padres a charlas en el colegio informativas
• Reuniones periódicas de los padres con el servicio de orientación del centro
• Reuniones periódicas de los padres con los tutores y personal docente
• Evaluaciones periódicas del rendimiento del alumnado en el centro escolar
• Poner en conocimiento del centro escolar por parte de los padres aquellos asuntos médicos que competan al desarrollo y funcionalidad del alumno/a
• Buena Actitud de los padres frente al profesor de su hijo 

El orientador debe supervisar que las medidas propuestas de actuación dentro y fuera del aula se están realizando de forma correcta por parte del equipo docente y atender a las peticiones y necesidades de orientación e información del profesorado.

De esta manera, el equipo de orientación pude detectar la presencia de dificultades y problemas que vaya surgiendo tanto a nivel académico, como social, emocional o familiar, y así serán capaces de poder paliarlas.